domingo, 25 de enero de 2009

Ética Budista moderna



1. No idolatrar ninguna doctrina, teoría o ideología, sea cual sea, incluido el budismo. Los sistemas de pensamiento budistas deben ser considerados como guías para la práctica y no como la verdad absoluta.

2. No pensar que uno posee un saber inmutable o la verdad absoluta. Hay que evitar la estrechez de mente y el apego a los propios puntos de vista. Aprender y practicar la vía del no-apego con el fin de permanecer abiertos a los puntos de vista de los demás. La verdad sólo puede hallarse en la vida y no en los conceptos. Hay que estar dispuesto a continuar aprendiendo durante toda la vida y a observar la vida en uno mismo en el mundo.

3. No forzar a los demás, incluidos los niños, a adoptar nuestros puntos de vista a través de ningún medio sea cual sea: autoridad, amenaza, dinero, propaganda o educación. Respetar las diferencias entre los seres humanos y la libertad de opinión de cada uno. Saber, sin embargo, utilizar el diálogo para ayudar a los demás a renunciar al fanatismo y a la estrechez de espíritu.

4. No evitar el contacto con el sufrimiento ni cerrar los ojos ante él. No perder la plena conciencia de la existencia del sufrimiento en el mundo. Encontrar medios de acercamiento a los que sufren, ya sea a través de contactos personales, visitas, imágenes, sonidos... Despertarse y despertar a los demás a la realidad del sufrimiento en el mundo.

5. No acumular dinero ni bienes cuando millones de seres sufren hambre. No convertir la gloria, el provecho, la riqueza o los placeres sensuales en la meta de la vida. Vivir simplemente y compartir el tiempo, la energía y los recursos personales con aquellos que están en la necesidad.

6. No conservar la cólera o el odio en uno mismo. Aprender a examinar y a transformar la cólera y el odio cuando aún no son más que semillas en las profundidades de la conciencia. Cuando la cólera y el odio se manifiesten, debemos enfocar la atención sobre la respiración y observar de manera penetrante con el fin de ver y comprender la naturaleza de esta cólera u odio, así como la naturaleza de las personas que se supone son la causa. Aprender a mirar los seres con los ojos de la compasión.

7. No perderse dejándose llevar por la dispersión o por el entorno. Practicar la respiración consciente y enfocar la atención sobre lo que está sucediendo en este instante presente. Entrar en contacto con aquello que es maravilloso, lleno de vigor y de frescor. Sembrar en uno mismo semillas de paz, de alegría y de comprensión con el fin de ayudar al proceso de transformación en las profundidades de la conciencia.

8. No pronunciar palabras que puedan sembrar la discordia y provocar la ruptura de la comunidad. A través de palabras serenas y de actos apaciguadores, hacer todo el esfuerzo posible para reconciliar y resolver todos los conflictos, por pequeños que sean.

9. No decir cosas falsas para preservar el propio interés o para impresionar a otros. No pronunciar palabras que siembren la división y el odio. No difundir noticias sin la seguridad de que son ciertas. No criticar ni condenar aquello sobre lo que no se está seguro. Hablar siempre con honestidad y de manera constructiva. Tener el coraje de decir la verdad sobre las situaciones injustas incluso si nuestra propia seguridad queda amenazada.

10. No utilizar la comunidad religiosa para el interés personal ni transformarla en partido político. La comunidad en la que se vive debe sin embargo tomar una posición clara contra la opresión y la injusticia y esforzarse en cambiar la situación sin comprometerse en conflictos partidistas.

11. No ejercer profesiones que puedan causar daño a los seres humanos o a la naturaleza. No invertir en las compañías que explotan a los seres humanos. Elegir una ocupación que ayude a realizar el propio ideal de vida con compasión.

12. No matar. No dejar que los demás maten. Encontrar todos los medios posibles para proteger la vida y prevenir la guerra. Trabajar por el establecimiento de la paz.

13. No querer poseer nada que pertenezca a los demás. Respetar los bienes de los demás pero impedir cualquier tentativa de enriquecimiento a costa del sufrimiento de los demás seres vivos.

14. No maltratar el cuerpo. Aprender a respetarlo. No considerarlo únicamente como un instrumento. Preservar las energías vitales (sexual, respiración y sistema nervioso) a través de la práctica de la Vía. La expresión sexual no se justifica sin amor profundo y sin compromiso. Concerniente a las relaciones sexuales, tomar conciencia del sufrimiento que puede ser causado a otras personas en el futuro. Para preservar la felicidad de los demás hay que respetar sus derechos y compromisos. Ser plenamente consciente de la propia responsabilidad a la hora de traer al mundo nuevos seres. Meditar sobre el mundo al que traemos estos seres.

martes, 20 de enero de 2009

Barack Obama



Ok, esta foto no necesariamente implica una ideología al respecto del nuevo presidente de los Estados Unidos. Es un poco temprano para sacar conclusiones, suponiendo que es el primer día de su mandato. Aún así este día, 20 de enero del 2009, marcó la historia. Estoy segura de que en el futuro va a haber películas a cerca del "primer presidente negro en los Estados Unidos". Puff, me jode un poco que tengan que repetirlo una y otra vez como si fuera esa la causa por la que lo votaron. Ozea, yo si voto a alguien es porque pienso que podría ser un buen presidente, no por pertenecer a determinada raza (o género, o religión...). Igual hoy fue un día feliz, no solo para aquellos que se alegran por el ascenso de Obama sino porque... ¡se fue Bush, siiiiiiiiiii!. Sea lo que sea, ¡Obama es un avance al lado de Georgie!

domingo, 18 de enero de 2009

Utopía

A menudo se tilda de utopía a aquello que se considera imposible, ilusorio o demasiado bueno para ser cierto, pero una de sus definiciones más felices es "utopía es todos aquellos sueños no realizados pero no irrealizables". Esto quiere decir que, que no se haya visto no quiere decir que no se pueda llegar a ver. Gobernar el fuego, fabricar hielo, viajar por el cielo o respirar bajo el agua, fueron utopías de otro tiempo que hoy son hechos cotidianos. El derecho de ser indígena, el voto de las mujeres o que la opinión de los niños sea tomada en cuenta, también fueron utopías para millones de almas ignoradas.

La pena de muerte


La pena de muerte da lugar a una múltiple violación a los derechos humanos ya que implica un trato cruel, inhumano y degradante que concluye con el premeditado e irreparable ataque mortal a una persona, llevado a cabo desde el propio Estado. Ninguna de las motivaciones por las cuales en el pasado se sostenía la utilidad de la pena capital resiste hoy el menor análisis, ni aún la que sostenía que era efectiva para lograr una mayor disuación de la delincuencia.
Con frecuencia quienes alientan la aplicación preguntan: "¿Qué haría usted con una persona que ha cometido un delito aberrante contra alguien de su familia?". Es probable que nuestra reacción se la búsqueda de la venganza personal. Sin embargo cuando hablamos de pena de muerte nos referimos a una conducta estatal y el Estado debe guiar sus actos a partir de criterios racionales y no emocionales. De hecho, el derecho penal fue creado para dejar de lado la aplicación de la "justicia por mano propia", el "ojo por ojo" basado en la venganza. En su lugar, debería regir el valor de la justicia democrática, propio de una sociedad capaz de demostrar mayor civilidad que las personas a quienes se les aplicó la ley penal.
Además, la administración de justicia es una actividad humana y por lo tanto, siempre existe el riesgo de que se cometan errores judiciales. Se conocen en la historia muchos casos de aplicación de pena de muerte a personas que posteriormente se comprobó que eran inocentes.
Actualmente el uso de la pena de muerte ha sido abolido en casi todos los países europeos (excepto Bielorrusia), y la mayoría de los correspondientes a Oceanía (como Australia, Nueva Zelanda y Timor Oriental). En América, Canadá y la mayoría de países latinoamericanos han abolido completamente la pena de muerte, mientras que los Estados Unidos de América, Guatemala y la mayoría de los estados del Caribe la mantienen en vigor, y Brasil la contempla como castigo en situaciones excepcionales, como por ejemplo para castigar la traición cometida en tiempo de guerra. En Asia la pena de muerte está permitida en democracias como Japón e India. En África, se aplica aún la pena de muerte en democracias como Botswana y Zambia.
El 80% de las ejecuciones son llevadas a cabo por Estados Unidos, Irán y China.

Ver también Reclamando justicia del el otro lado del asunto

Panteísmo

Por Carlos Armando De Castro P.

No hay una religión revelada verdadera, la realidad es que para comprender el Universo que nos rodea, la humanidad debe empezar a ver otros puntos de vista aparte del de las religiones, que, como lo demuestra la historia -la verdadera, no la que enseñan en las aulas de clase- únicamente han traído guerras en el nombre de sus respectivos dioses -el cual creen que es el verdadero Dios- han interferido con el progreso científico y humanístico, y sólo buscan la mayoría de ellas el condicionamiento de la mente humana por medio de la amenaza de un castigo post-mortem para evitar el libre pensamiento del hombre, teniendo a la humanidad condicionada a la voluntad de unos pocos seres humanos que lo único que hacen es abusar de los fieles y los creyentes de esas religiones para obtener beneficios personales y/o institucionales. El ser humano sólo puede comprender el Universo en el que vivimos y su propio ser por medio del pensamiento racional y la investigación científica, no debe quedar satisfecho con lo que se le dice y creer ciegamente en algo de lo que no sabe si es realmente como se lo están diciendo, porque si se nos es pedido que creamos en algo que dicen unas cuantas personas sin ninguna prueba tangible es porque algo se traen entre manos, ¿debe uno creerle a todo el que venga diciendo que ha sido enviado por el mismísimo Dios?¿Cómo hacer para saber si es verdad o mentira, si la única garantía que se tiene es la palabra de quién lo dice y de algunas personas cercanas a él?. El ser humano debe indagar y perseverar hasta hallar una respuesta que satisfaga su apetito de conocimiento y no contentarse con cualquier cosa que se le diga.
El panteísmo es la forma de ver al mundo que me parece más lógica y posible; Dios (el verdadero, no el de ninguna religión) no es más que todo lo que constituye el Universo (o los Universos que -¿por qué no?- puede haber), todo lo que existe es en realidad Dios, y Dios es todo lo que existe, por lo que todos y cada uno de nosotros y todo lo que nos rodea somos parte del mismo Dios, de lo cual se deriva un respeto hacia la naturaleza, los animales y la desaparición de todas las diferencias que existen entre los seres humanos y que tanto mal traen a este planeta. Sobre la existencia de un Ser Personal, Creador y Arquitecto del Universo, que existe más allá del mismo, no hay necesidad de tal. Dicen que la prueba de que existe un Dios Perfecto y Omnisciente Creador del Universo es la complejidad y la grandeza del Universo, por lo cual debería haber sido hecho por un Ser Perfecto y Todopoderoso. Sin embargo, he aquí una objeción: ¿es necesario que el Universo haya sido creado o que la materia-energía que lo constituye haya tenido un principio? Se dice que el Universo tuvo un Creador, que ha creado todo de la nada. A la pregunta ¿de dónde salió ese Creador? , la respuesta es: no tiene origen y ha existido siempre, y sin embargo existe y existirá siempre; siguiendo por el mismo razonamiento anterior de que hay un ser que no tuvo principio y sin embargo existe y existirá siempre, puede afirmarse sin ningún problema que el Universo, mejor dicho, la materia y la energía (y quizás otras cosas que no sepamos que hay) que lo constituyen, no tuvo ningún principio, que ha existido siempre y existirá siempre, lo cual no contradice las teorías científicas actuales y hasta va de la mano con ellas, ya que el inicio del Universo que conocemos, el Big Bang, se dio por la materia-energía que ya existía, la cual se encontraba concentrada por acción de su propia gravedad, y según la teoría del Big Crunch, toda la materia del Universo volverá por la gravedad a concentrarse algún día en un único punto, para volver a haber otra explosión y continuar con el eterno ciclo, por lo que la materia-energía del Universo no tuvo un comienzo, ni tendrá fin (por cierto, léase algo sobre la conservación de la energía), el Universo (Dios) existe desde y para siempre, este no fue el primer Big Bang, y ciertamente no será el último, todo lo que existe ha existido y existirá siempre. Lo que es, no puede dejar de ser. Y de la nada no sale nada. No debe interpretarse que debe adorarse a la materia o a la naturaleza por ser parte de Dios. No, no hay que caer en el paganismo o la idolatría, que únicamente constituirían un atraso en el desarrollo intelectual del ser humano, no hay que inclinarse ante el sol o ante la luna, simplemente admirar e intentar comprender la belleza y la grandeza inimaginable del Universo, reflejo de la grandeza de Dios de la que nos hablan las religiones (algo de verdad tenían que tener), inmensidad que todavía está más allá del alcance de la mente del común de los mortales, pero que quizás algún día, cuando la humanidad haya evolucionado lo suficiente -si no se destruye ella misma antes de lograrlo-, lo estará.